A veces, lo que necesitas son unas buenas regañadas y si la vida te las da mientras viajas por Puebla o Oaxaca, ¿qué mejor?
Las regañadas son una especie de galleta típica de Oaxaca y Puebla cuya historia de origen es difusa, pero de tradición deliciosa. Aunque en algunos pueblos son una tradición del Día de Muertos, en otros puedes disfrutar de estos postres a lo largo de todo el año.
En los pueblos del Istmo de Tehuantepec, las regañadas tienen forma de triángulo, rectángulo o de arco, como una empanada. Algunos de los ingredientes empleados para su realización son harina de trigo, manteca de cerdo, sal, azúcar, mantequilla, además de algo de canela y azúcar rosa para la cubierta.
Tradicionalmente, se producen en los días previos a Semana Santa y Día de Muertos. Cada pieza suele representar el alma de una persona fallecida. CONOCE EL PAN DE ÁNIMAS DE ACÁMBARO.

Por otra parte, en el centro de Oaxaca y algunas partes de Puebla, las regañadas tienen una forma circular. Normalmente, estas no contienen mantequilla ni canela, pero conservan el sabor dulce y una textura crujiente. Puedes disfrutar de estas piezas de repostería todo el año.
Como dato interesante, el nombre ‘regañadas’ en México se remonta a las casonas coloniales. En ellas, se enviaba a las jovencitas a trabajar en la cocina para evitar su socialización con los hombres visitantes de las casas. Las mujeres aceptaban las órdenes a regañadientes, por lo cual el fruto de su trabajo comenzó a ser denominado ‘regañada’. DESCUBRE TAMBIÉN EL POC CHUC DE YUCATÁN.
¿De dónde vienen las regañadas?
Se dice que estas galletas son tradicionales de los pueblos del Istmo de Tehuantepec. Sin embargo, algunos materiales, como la manteca de cerdo, dejan claro que la forma actual de las regañadas son resultado de un sincretismo gastronómico y cultural.
De hecho, en la provincia de Andalucía (España) existe un tipo de galleta llamada regañá. El pueblo de Alcalá de Guadaira, cerca de Sevilla, es el que tiene las regañás más famosas.
Estas galletas españolas se producen con harina de trigo, masa madre y sal. Su popularidad creció principalmente durante las épocas de exploraciones en América. Esto debido a que, guardadas en un lugar seco, las regañás pueden conservarse durante meses o incluso años.
Gracias a esto, una gran cantidad de marineros las incluían como parte de su dieta durante los viajes. Hoy en día, las regañás se emplean para comer con tapas y otros refrigerios salados. MIRA DÓNDE COMPRAR BARRO NEGRO EN OAXACA.

¿Conoces algún estado además de Oaxaca y Puebla que incluya las regañadas entre su pan tradicional?
Con información de Larousse Cocina, Picolé y México Desconocido