Al momento de salir de viaje con nuestra pareja, las personas LGBT+ nos hemos enfrentado a momentos incómodos que llegan a arruinar la experiencia.
Sin duda, cuando salimos de viaje con nuestra/o/e novia/o/e o esposa/o/e, las personas LGBT+ atravesamos por algunos momentos incómodos, así que para evitar que tu experiencia y la de tu pareja se vea afectada te compartimos algunos consejos para responder a determinadas situaciones que puedes enfrentar.
Aunque los hoteles, las agencias de viaje y guías de turismo suelen dar la bienvenida con los brazos abiertos, ciertas acciones o expresiones llegan a ser invasivas. Algunas de ellas no son intencionales. Otras, como lo podrían ser el misgendering y el deadnaming, tienen la finalidad de ofender. CONOCE LOS MEJORES DESTINOS LGBT+ PARA VIAJES DE PAREJA.
Es cierto: cuando salimos de vacaciones o asistimos a algún evento nuestro mayor objetivo es pasarla chévere. Sin embargo, ni nosotres ni nuestra pareja, o demás personas de la comunidad LGBT+, tenemos la obligación de quedarnos callades ante momentos incómodos durante el viaje, mucho menos si es en razón de orientación sexual e identidad de género.
Before we start: es importante tener en cuenta que, aunque los temas de diversidad sexual son de índole universal, estos no pasan por el mismo imaginario social. Por supuesto, eso no da pauta a que el personal de los hoteles o demás lugares que brinden servicios relacionados con el turismo tengan el derecho para discriminar.
«No se parecen mucho, ¿a poco son familiares?».
Es probable que si abordas algún taxi u otro medio de transporte, quien conduce te pregunte sobre el vínculo con tu pareja. Recordemos que no en todos los países, estados o incluso municipios y provincias la unión entre personas LGBT+ está regulada o reconocida.
Si ambes se sienten cómodes diciendo que son pareja, then you go! En caso de que la pregunta sea invasiva o en un tono violento, una forma de dar a entender que son parte de la comunidad LGBT+ es platicar un poco sobre el contexto de los derechos en tu país. CHECA TODAS LAS PLAYAS GAY QUE PUEDES ENCONTRAR EN MÉXICO.
«Ok. Son lesbianas, ¿entonces quieren las camas separadas o no?».
Al salir de viaje con la pareja, otro de los momentos incómodos a los que nos enfrentamos como personas LGBT+ es que frecuentemente se nos vea bajo vínculos de amistad o parentesco. Esto es más común para las chicas lesbianas, bisexuales y pansexuales.
Además de que al momento de tomarnos una foto o pedir nuestra orden en un restaurante se nos diga: «¿Es su hermana/amiga?», cuando estemos en la recepción de un hotel nos pueden preguntar si queremos un cuarto con camas separadas.
Es importante que no nos hagamos de la vista gorda con la intencionalidad. Si la/el recepcionista te ofrece una habitación con camas individuales aún después de que en tu reservación detallaste lo que necesitabas, estás frente a una expresión sutil —o no— de LGBTfobia. CONOCE ESTOS OTROS PUEBLOS MÁGICOS LGBT+.
We know it: de tantas veces que nos ocurre, nos dan ganas de explotar. Sin embargo, antes de hablar con la víscera estamos en nuestro derecho de confirmar lo que pedimos.
Si con esto, la persona encargada nos niega el servicio, es momento de denunciarlo con el personal del hotel o las instalaciones en las que estemos. En caso de no obtener respuesta, podemos recurrir a otras vías, como lo es la denuncia pública. MIRA LOS DESTINOS LGBT+ QUE DEBES VISITAR SI AMAS LA PLAYA.
«No se pueden besar aquí. Va contra nuestras políticas».
Dentro de los momentos incómodos que nos pueden pasar como pareja LGBT+ en un viaje también se encuentra el uso diferencial del espacio. A todes se nos ha antojado compartir la piña colada con nuestra pareja mientras estamos en la alberca o la playa.
No es poco común que alguien a quien en tu vida habías visto se acerque para decirte que «no hagan cochinadas». Incluso, te lo llega a decir alguien del personal del restaurante o bar. Con la COVID-19 no faltará la persona que quiera justificar su conducta LGBTfóbica como «medidas de protección».
Esta experiencia tan desagradable también se puede replicar mientras tú y tu pareja se dan un beso en el lobby o durante un recorrido al pueblo cercano, las cascadas o el bosque.
En este tipo de situaciones el diálogo no suele ser una alternativa de solución. Las personas que no te quieren ver, mucho menos te quieren escuchar. Si alguna vez te has retirado para evitar ‘broncas’, no te sientas culpable. Cuando nos sentimos vulnerades, nuestra primera reacción es irnos. And it’s fine. DESCUBRE LOS MEJORES DESTINOS PAR EL TURISMO LGBT+.
Demostrar cariño no debería ser uno de los momentos incómodos de una pareja LGBT+ durante un viaje
No obstante, es fundamental que tengas en mente que demostrar tus afectos no es dañino. Ahora, si optas por quedarte con tu amorts, eventualmente las personas que se sientan incómodas de verles se van a retirar.
Sea la decisión que tomes, no eches en saco roto lo que te hizo sentir esa actitud. Acude con el personal del lugar y solicita alguna acción en concreto. Si te interesa visibilizarlo, también habrá algún colectivo LGBT+ que te brinde apoyo. ESTOS SON LOS PAÍSES CON MÁS PERSONAS LGBT+.
¿Recuerdas otros momentos incómodos por los que hayas atravesado cuando saliste de viaje con tu pareja LGBT+? Cuéntanos para así poder compartir más consejos.
Texto de Ana Flores